¿Qué tienen en común un maratonista keniano y las empresas que sobreviven, e incluso se superan en tiempos de crisis? 

El 12 de octubre del 2019 Eliud Kipchoge hizo historia al correr un maratón en menos de dos horas, convirtiéndose en el primer hombre en lograr esta hazaña y rompiendo una barrera por mucho tiempo pensada inquebrantable. Detrás de la proeza del keniano, hay una serie de enseñanzas importantes sobre cómo la preparación y la tecnología nos pueden ayudar a lograr mayor eficiencia.

Para correr 42.2 Km en menos de dos horas se necesita llevar un ritmo de 2 minutos con 50 segundos por kilómetro. Esta velocidad es la que tienen comúnmente los atletas universitarios de alto desempeño en sprints y carreras de mucho menor distancia. Kipchoge tuvo que conservar ese ritmo por 120 minutos. Es decir, tuvo que mantener su cuerpo funcionando a su máximo de eficiencia por un período prolongado.

¿Cómo lo logró?

Primero, aunque Kipchoge es un atleta del más alto nivel, tuvo que hacer cambios en su entrenamiento normal y su dieta. Por más de cuatro meses Kipchoge entrenó constantemente en Kenia- viviendo una existencia casi monástica en la que todo giraba alrededor de hacer su cuerpo más eficiente. Incluso agregó entrenamiento de fortalecimiento de la zona abdominal para evitar tensión en los tendones. Todo esto con un objetivo en mente: correr un maratón en menos de dos horas

Una vez que estaba seguro de que su cuerpo operaba de la manera más eficiente, su equipo agregó tecnología. Seleccionaron una pista en Viena muy plana y muy recta, con pocas vueltas. Agregaron un equipo de 5 atletas en formación de V para protegerlo del viento, tomando turnos para mantener el ritmo. Finalmente aprovecharon un par de zapatos deportivos diseñados para mejorar el tiempo de los maratonistas.

Todos estos factores contribuyeron para que Kipchoge lograra su máxima eficiencia y rompiera la barrera del maratón de dos horas.

Esta misma búsqueda de la eficiencia es común en las empresas, especialmente en tiempos de crisis económicas, donde debemos aprender a operar con menos para lograr los márgenes que mantendrán a la compañía rentable durante el período de desaceleración económica. Podemos aprender varias lecciones de Kipchoge.

Las lecciones de Kipchoge

Primero Kipchoge mejoró su preparación personal para encontrarse en condiciones óptimas para lograr su meta. Llevaba un régimen estricto de entrenamiento, alimentos y descanso enfocado 100% en que su cuerpo estuviera funcionando de manera óptima para el evento. De manera similar, en las empresas, lo primero es optimizar las operaciones con los recursos que se tienen internamente: Producto, Procesos y Personas.

Se debe planear bien el producto que se va a producir de acuerdo a las necesidades de los clientes (recordemos que la meta es la rentabilidad, no la producción de más producto en menos tiempo). Para esto se debe tener una coordinación cercana con las áreas comerciales y de estrategia, que pueden planear la demanda e informar las decisiones de programación de producción. También se pueden utilizar datos históricos y del mercado que, analizados con algoritmos, pueden ayudar a planear la programación de producción de la manera más eficiente evitando cambios innecesarios en las líneas de producción. De esta forma se ahorra tiempo del planeador y se le da un rol de toma de decisiones, basada en datos confiables, no solo en experiencia.

En procesos se puede evaluar que los técnicos tengan todos los materiales requeridos a la mano, de manera que tengan la menor cantidad de movimientos innecesarios. Las máquinas y su acomodo se pueden optimizar para asegurar el flujo más eficiente entre las partes del proceso productivo. También se pueden programar mantenimientos preventivos para evitar paros por accidentes o disfunción.

El personal de la planta a su vez puede presentar oportunidades de mejora en eficiencia. Se busca evitar que se requieran pagos de tiempo extra para llegar a las metas acordadas con las áreas comerciales y de estrategia. También se pueden evaluar los procesos para asegurar que ningún trabajador tarde demasiado en un paso o que otro trabajador tenga demasiada carga de trabajo.

Es muy común ver que si se hace un análisis profundo del estatus de producción en cualquier industria, y se revisan a detalle los movimientos del piso, existan oportunidades de mejora muy claras. En Sintec Consulting contamos con la capacidad de evaluar las plantas productivas y lograr una mejora en fill rate entre 5-10 puntos y una reducción entre el 5-15% en costo de operación. Todo esto trabajando solo con los recursos existentes de la compañía.

Ya optimicé mi proceso productivo instalado. ¿Qué sigue?

Para aquellos que, como Kipchoge, quieren romper barreras, muchas veces se necesita agregar tecnología para lograr las metas. En el caso del maratonista keniano, esta tecnología estaba principalmente en la selección de ruta, el equipo de corredores que lo acompañó y los tenis Nike Vaporfly Next%, pero ninguno de estos habilitadores hubiera servido si el corredor no hubiera preparado a su cuerpo a los niveles óptimos.

Contando con las bases correctas, las compañías pueden recurrir a tendencias tecnológicas como la automatización de procesos, automatización basada en información y la terciarización. Sintec puede ayudar a las compañías a evaluar las opciones y tomar decisiones más informadas para seleccionar las más adecuadas.

La automatización de procesos incluye agregar robots para automatizar partes de la cadena productiva. Sintec puede ayudar a las empresas a evaluar si conviene agregarlos considerando el costo de adquisición y mantenimiento comparado con los sueldos, prestaciones y otros factores que representan los empleados humanos.

En cuanto a automatización basada en información, existen sistemas inteligentes para programar la producción a partir de los datos de capacidad de recursos productivos, matrices de set up y restricciones de secuenciación, SAP Production Planning / Detailed Scheduling es uno de ellos. Con este programa, se puede reducir el tiempo de programación para el gerente encargado, asignándole un rol más de toma de decisiones y menos de experiencia. Sintec puede ayudar a las compañías a determinar si una solución de este tipo los puede ayudar a lograr sus metas, e incluso puede ayudar a implementarla.

La terciarización es otra tendencia que puede ayudarnos a optimizar la producción. Delegar tareas poco frecuentes o muy costosas a un tercero, puede reducir significativamente los costos operativos si se hace de manera inteligente. Para ello es necesario determinar qué partes de la cadena productiva o qué productos conviene tercerizar. Sintec puede ayudar a las empresas a hacer un análisis en base a costos, control de calidad y logística para tomar una decisión más informada en esta instancia.

El mensaje es claro: no se trata de comprar tecnología y esperar que haga magia. Hay que preparar a la organización, elegir la tecnología correcta y asegurar su implementación.

Esta combinación entre la preparación y optimización interna, ayudada por las tendencias tecnológicas de la industria puede ayudar a las empresas, no solo a sobrellevar los tiempos de crisis, sino que también a romper barreras, como lo hizo Kipchoge con el maratón de dos horas. Para ello, es importante contar con el apoyo de un experto en la materia que pueda brindar evaluaciones objetivas y dar consejos atinados para optimizar el desempeño productivo de la empresa de acuerdo a un objetivo común- la rentabilidad.

Referencias

• Arribas, Carlos. “Eliud Kipchoge, Primer Atleta Que Baja De Las Dos Horas En Un Maratón: 1h 59m 40s.” EL PAÍS, Ediciones EL PAÍS S.L., 13 Oct. 2019, https://elpais.com/deportes/2019/10/12/actualidad/1570844672_066863.html.
• Keh, Andrew. “Eliud Kipchoge Breaks Two-Hour Marathon Barrier.” The New York Times, The New York Times, 12 Oct. 2019, https://www.nytimes.com/2019/10/12/sports/eliud-kipchoge-marathon-record.html.